Diferentes maneras y modos de hacer el Camino de Santiago

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Hace algunos años, esta milenaria ruta que atraviesa el tercio norte de la península ibérica en su versión más tradicional que es el Camino Francés, estuvo a punto de desaparecer por falta de peregrinos, y solo el empeño y la voluntad de un párroco gallego y de gente que le apoyó consiguió que reviva, siendo hoy una de las rutas de peregrinación más transitadas.

Ser tan conocida es lo que hoy permite que existan varias maneras de realizarlo.

Por un lado están los modos tradicionales, a saber, a caballo, en bicicleta y a pie.

A caballo es el que más planificación necesita pues deben planificarse las paradas para reservar los servicios y estancia de los caballos.

Pero tanto en bicicleta como a pie, existe la posibilidad de contratar servicios de transporte de equipaje que lo recogen de tu lugar de pernoctación y lo dejan en el lugar acordado, esto mejora la calidad de la marcha al tener que llevar mucho menos peso a la espalda o en las alforjas de la bicicleta.

Todavía hay un modo más sibarita y refinado. Se trata de compañías que ofrecen realizar el camino pernoctando, ya no en los albergues de peregrinos, sino en hosterías, hoteles y paradores de mucha mayor calidad y con servicios de masajes, saunas y/o jacuzzis y que ofrecen a lo largo de la jornada paradas programadas con pic-nic incluido para reponer fuerzas.

La elección solo es cuestión del dinero disponible.